La primera vez que fui a la estación de tren en Dar es Salaam a comprar dos billetes de primera clase destino Mwanza me dijeron que estaba todo completo.
El señor que me atendió me dijo: – Completo, usted ha venido muy tarde estando en vísperas de Navidad.
Como no me rindo a la primera me fui a la otra estación de tren, «Tazara» para ver si quedaban plazas. No me importaba el destino lo que quería era viajar en tren. Aquí también obtuve un no como respuesta. Pero algo me dijo que la pregunta no era suficiente y que la paciencia era más importante. Observando a la gente local me di cuenta que ellos insistían en conseguir un billete aunque en un principio no hubiese plaza.
Al día siguiente decidí probar otra vez y llamé por teléfono a la estación de «Central Line». Una persona muy amable me atendió y después de varias comunicaciones por teléfono con ella conseguí dos billetes en primera clase. Hasta que no tuve los billetes en mi mano, a cinco días de marcharme, no tuve la certeza de que era verdad. No entiendo muy bien cual es el sistema de venta y reserva de billetes pero parece que la paciencia y dar con la persona adecuada es la clave de ello y se aplica tanto si eres extranjero o local.
Cruzando África
«Main Line» cruza Áfríca central completando unos 1300 Kms. Hay acuerdos pendientes con Turquía para mejorar los trenes pero va despacio como el tren. Aún viajando en primera clase la comodidad se perdió en tiempos coloniales. El precio del billete: 75TSH que sería algo así como 30euros. El tren no ha experimentado cambios desde entonces. Bueno sí, para cerrar la ventanilla tienes que hacer tope con un palo de madera. Por la noche debe estar cerrada para protegerse de los ladrones. El ventilador acumula polvo desde tiempos inmemorables y ahora hace la función decorativa. Y el calor que se concentra cuando la ventanilla y la puerta está cerrada es como estar en una sauna sin poder respirar.
Pero a pesar de estos “inconvenientes” que por supuesto ya damos por sentando queriendo atravesar Tanzania el viaje se enriquece desde el primer momento que pisas la estación. No solamente es un medio de transporte si no que también es el medio de vida para mucha gente. En la estación compramos pan de molde que es lo que más compraban los tanzanos. Luego nos dimos cuenta que este pan aguanta mucho más que otros a temperaturas altas. También compramos litros de agua para un viaje de 36 horas aproximadamente.
Conocer Tanzania
Viajar en tren es: Conocer Tanzania a través de los diferentes paisajes que vas viendo : campos de cultivo, maíz, arroz… En algunas partes muestra un terreno estéril pero en otras el color predominante es el verde.
Conocer Tanzania a través de las muchas paradas que hace el tren y tratar con los vendedores que ofrecen comida, miel de la zona, frutas locales, artículos de barro, de madera, de paja.
Conocer Tanzania y apreciar la diferente arquitectura de sus casas, muchas de ellas construidas con materiales locales de bajo coste frente a otras con materiales más costosos.
Salimos el 17 de diciembre, domingo a las 16.00 horas y llegamos a la estación de Mwanza el 19, martes a las 11.00 de la mañana. Un total de 44horas. Por supuesto, que estaba entumecida y con ganas de estirar mis piernas pero ahora me sentía más cercana a ellos, los tanzanos.